Jornada de lunes en el pabellón San Matías de Taco y nueva victoria del representativo teguestero en esta segunda autonómica tan igualada. Séptimo triunfo consecutivo de los de Itamar Barreto y otra vez, como no podía ser de otra manera, final de infarto. Los titulares del pabellón quisieron cortar la racha de los del Cicar Tegueste, que poco les faltó, pero la fe y la garra que pusieron estos en los últimos instantes dieron al traste con las pretensiones de los de Cano.
Razones de importancia no nos permitieron ver los dos primeros cuartos que nos contaron como de dominio visitante con ventajas en el marcador y un juego sencillo y acompasado. 26-33 marcaba el luminoso en el tiempo de descanso cuando pudimos incorporarnos.
El comienzo del tercer cuarto nos recuerda otros comienzos del mismo tiempo bastante recientes. Y casi que fue un calco del partido de La Guancha donde hubo que remar contracorriente por no cerrar bien la defensa y ser condescendiente con el rival. Aquí en Taco pasó eso mismo. Comenzar el cuarto y los de casa que en un parcial de 9-0 se ponen a dominar el encuentro con una defensa en zona impenetrable y un conjunto visitante con la pólvora mojada. Cicar Tegueste parece otro equipo, se muestra muy vulnerable, no tiene juego interior y los balones se pierden en acciones de principiante. En ese instante Tito pide un tiempo muerto y pone orden en los suyos. Ya el resto del cuarto los locales se habían crecido y van a por la victoria. Menos mal que los de verde hacen un esfuerzo para contrarrestar semejante intento y ponen el 45-45 en el marcador cara al definitivo cuarto tras un parcial de 19-12 para los locales.
El último cuarto se anunciaba a cara de perro y en él hubo mucho que contar. Durante más de la mitad del cuarto ambos equipos luchaban por nivelar el marcador y cuando uno marcaba surgía la canasta compensatoria por el otro bando. 59-59 a falta de 4 minutos. 61-61 a falta de 2 minutos y medio. Con ese tiempo por delante cualquier error en uno u otro conjunto podía tirar por tierra todo lo trabajado hasta el momento. Y fue San Matías el que dio con los morros en el suelo y le costó el encuentro. 62-65 a un minuto y medio. 62-68 a 30 segundos. Triple local después de tiempo muerto 65-68 y 26 segundos para jugar. A partir de ahí los ataques solo eran forasteros pues una tras otra iban cayendo las faltas rápidas y uno tras otro iban consiguiendo los rebotes los de Tegueste. 65-69, 65-70, 65-71 y 65 73 todos desde la linea de los libres y con la fortuna de recuperar la posesión cuando el tirador erraba. Al final, el definitivo 65-73.
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